SERVICIOS
Rehabilitación y refuerzos de estructuras de edificios
¿Mi edificio sufre alguna patología grave?
Antes de tratar correctamente una patología debemos conocer su causa, así es como podremos proponer la mejor opción para repararla.
¿Cuáles son las patologías más comunes?
Hay muchos tipos de patologías estructurales, desde erosiones, fisuras, grietas, flechas, afectaciones de cabios, sequedad de la madera, afectación de pilares de hierro por causa del fuego, corrosión de armaduras empotradas, desestructuración de la composición de la piedra, patología del hormigón armado, carbonatación del hormigón, agrietamientos, colapsos...
¿Estas patologías pueden afectar de manera grave a mi edificio?
Patologías como la aluminosis, la carbonatación o las piritas acortan la vida de los elementos constructivos realizados en hormigón. Si en la construcción de su edificio se utilizó madera como elemento ornamental o estructural podría estar sufriendo también los efectos de patologías provocadas por la presencia de termitas, carcomas u hongos. Todos estos agentes afectan de manera diferente al edificio. La pérdida de masa y resistencia de los materiales puede llegar a ser crítica, por eso hay que hacer un buen diagnóstico a tiempo.